Contradicción socialista y bolivariana en el Esequibo


Recientemente, entre Venezuela y Guyana se ha dado un impase diplomático por un territorio denominado "Esequibo". Hay varios factores históricos en los que Venezuela hace su reclamo (ver aquí), pero el mismo raya principalmente en contradicciones a nivel ideológico por parte del gobierno Bolivariano y Revolucionario.

Uno de los fundamentos de la reclamación venezolana es la usurpación del territorio por parte del Imperio Británico. Sin embargo, en el Esequibo se dieron dos usurpaciones: La realizada por el Reino Unido a Venezuela y la realizada por España a los pueblos indígenas (usurpación que heredó Venezuela). Si la colonización de facto de Inglaterra en el Reino Unido es motivo de reclamación territorial por parte de Venezuela, ¿entonces la colonización de facto de España es motivo para que los pueblos indígenas reclamen como propios los territorios usurpados y conformen uno o varios países independientes (hay alrededor de 50 pueblos indígenas en Venezuela)? De esta manera, la primera contradicción es la defensa de la "soberanía" en contraposición a la defensa de los derechos de los pueblos originarios, que evidentemente no tendrán la anuencia del gobierno nacional para conformar su propio país.

Con esta idea entramos a la segunda contradicción ideológica: Para la izquierda "la tierra es de quien trabaja" (Emiliano Zapata). Así, la tierra no es un objeto del derecho, y el uso, ocupación y permanencia está por encima de las leyes y pactos, de los cuales se suelen aprovechar los grupos dominantes para hacer valer sus intereses. Señalaba muy enfáticamente Karl Marx:
"La lucha de la clase obrera no tiene nada que ver con los intereses nacionalistas. El proletariado no defiende la creación de nuevas fronteras, sino su abolición; no defiende los privilegios de un territorio frente a los demás, sino la solidaridad y la unidad de clase frente a todas las divisiones; no pretende una distribución más equitativa de los beneficios, sino la abolición de la ley del valor, la subordinación de la producción a las necesidades humanas: «De cada cual según su capacidad; a cada cual según su necesidad»”
La tercera contradicción se encuentra en la ideología bolivariana. El sueño de Bolívar era la unión de América Latina, desde México hasta Argentina, en una misma nación. Quizás Bolívar pensaba más en Hispanoamérica, pero hoy en día toda la América Latina y el Caribe tiene metas comunes que han quedado materializadas con la creación de esquemas de integración y cooperación como UNASUR y CELAC. De esta manera, la acentuación de un problema limítrofe es un impedimento para la integración de los países, no solamente entre Venezuela y Guyana, sino también en otros casos de problemas limítrofes como los que hay entre Chile, Perú y Bolivia. Estoy bastante seguro que Hugo Chávez era conocedor e incluso promotor de las ideas bolivarianas de integración latinoamericana, pero esta vez sus "hijos" han decidido irse por otro lado.

Siempre he reconocido que es muy difícil vivir de acuerdo a lo que se cree, especialmente cuando las cosas escapan de tu control... Pero esta no es una de ellas.

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